jueves
❝❞ ━: Injusticia...
Era una injusticia no permitirme festejar cuando realmente quería reír.
Era una injusticia pues la mascara de felicidad que cargaba como cruz atada a mi espalda por fin fue liberada.
Era una injusticia tener que fingir dolor cuando este ya yacía tendido en algo que tenía muy bien merecido.
Era una injusticia tener que tragarme todo aquello que calle cuando por fin había decidido dejar de lado mi mudez.
Era una injusticia tener que estar a lado de alguien a quien no amaba.
Era una injusticia tener que besar labios que no eran los suyos.
Era una injusticia llamarme 'tal' cuando claramente era 'cual'.
Era una injusticia cuando me pidieron hacer una cruz cuando yo quería hacer la equis.
Era una injusticia pedir perdón cuando quería respeto.
Era una injusticia tener que repartir amor cuando yo claramente era odio por doquier.
Era una injusticia seguir teniendo miedo cuando estos fueron arrancados de raíz.
Y sobretodo...era una injusticia no saber porque llorar cuando el fantasma de las sábanas al fin se había marchado.
'El día de la profecía había llegado, lancemos plegarias en vez de desperdigar llanto falso pues el cielo realmente no estaba llorando.'
miércoles
❝❞ —: Otoño…
Escuche tu nombre de camino a la
escuela. Todo mi cuerpo se erizo. Repase mentalmente como tenía que caminar,
izquierda, derecha. Mi vista no se aparto del pavimento y temí poder tropezarme
con alguna persona o que ésta se tropezara conmigo.
Me senté a tu lado y callé pues las
conversaciones las llevabas tú y yo te sonreía pues no había nada más bonito
que ver tus labios moverse como hojas al viento o la brisa en las mañanas. Tocaste
mi mano y mi mente se nublo, balbuceé incongruencias y rezongaste a mi costado.
Tal vez mis mentiras hubieran sido tus
verdades pues así pienso que realmente hubiéramos sido felices. Sin embargo tú
añorabas a la lluvia como yo deseaba sonreír de verdad.
Entrelazo nuestras manos y escupo mis
verdades pero tú no me escuchas. Pues tú escuchas tanto como yo puedo hablar. Lo
mismo que me miras y siento tu mano en mi piel.
¿Cuánto tiempo vivimos siendo
desdichados?
Hubiera deseado ser el payaso que
matizaba risas y cosas con gracia. Pero mi mascara no ocultaba mis ojos enrojecidos
y tú lo notabas. Desde el estrado te observaba con la mirada perdida. Yo te
mentía y tú lo sabías. Me pediste sinceridad pero mis verdades eran cual carmín
que solo ocultaba mis muñecas y fingía ser la niña que tú querías que fuera.
Lo entendiste muy tarde cariño. Yo no
era primavera, pues las hojas se ocultaban en otoño y las raíces resaltaban
haciendo que tú solo pudieras llorar.
“Ahora solo me queda pedir perdón, pues las lágrimas se
convierten en tinta y es con ella que te escribo esta sinfonía.”
❝❞ —: En un día de lluvia…
Fue muy tonto en un comienzo ¿no lo
crees? Las palabras se atoraron en mi garganta que no supe que decir. Mis
acciones se vieron limitadas sin siquiera entenderlo. Solo eras una persona
común y corriente ¿Por qué causabas tantas cosas en mí? No te conocía ni tu a
mí.
Nuevamente me veo parado a mitad de la
calle esperando por una lluvia que no caerá y por unas palabras que dirás, pero
es imposible, porque ya no estas aquí y solo espero pacientemente poder
acompañarte alguna vez.
Los recuerdos suelen ser más difíciles
de olvidar si con ellos vienen los sentimientos que no pudiste olvidar, yo no
te olvide, y eso es lo que más me duele. Sigues siendo latente como la primera
vez que cruzamos nuestros nombres. Como aquel ángel que así como vino en otoño,
de igual manera se fue.
Envidié a las rosas porque estos
rosaron tus labios. Envidie a tu abrigo por cobijarte en su interior. Envidie
al mismísimo sol por proporcionarte calor en días calurosos.
Y ahora envidio al cielo por tenerte a
su merced. De igual manera un niño te mira y te sonríe, sus intenciones no son
malas lo entiendo y él me lo explico. Me dice que no puedo estar contigo y
lloro de impotencia…si tan solo hubieras esperado un poco más hubiera podido
decirte todo aquello que callé y exprese en una sola mirada.
Pero fuimos muy ingenuos…tú hubieras
podido esperar, y yo hubiera preferido no callar.
Pasamos días anhelándonos y ahora solo
estoy parado a mitad de la calle esperando por el fulgor de la luna que no
llegara.
Hoy llueve y sonrió porque de nuevo
todo lo hago mal. Tú no deberías llorar, sin embargo ahora días en soledad y
mañanas nubladas es todo lo que me puedes ofrecer y duele, juro que duele.
Sostengo en mi mano las esperanzas que
empiezan a desvanecerse, tu susurro llega a mi corazón y con la vista empañada
en llanto respondo que todo esta bien.
Porque tú no quieres verme…no aún.
Y yo no puedo hacer otra cosa que no sea llorar.
lunes
❝❞ ━: Brindemos en un nuestro teatro...
Bebámonos la vida en un solo trago en esta noche de luna llena, inhalemos y exhalemos nuestras esperanzas en este invierno que se avecina. Dopémonos con nuestras risas y volvámonos adictos a nuestra propia alegría. Rasguemos nuestras pieles hasta verlas sangrar y presenciemos el nacimiento de una nueva vida. Escupamos nuestros miedos y entonemos nuestras pesadillas.
Disfrutemos las maravillosas tragedias que nos brinda la vida, gritemos cuanto odiamos y amemos con desesperación. Tiremos por la borda el guion de nuestro espectáculo pues el teatro siempre estuvo vació. Aventémonos del primer avión al que subamos y huyamos de nuestra realidad creando nuestras propias verdades.
Experimentemos la adrenalina y bebámonos nuestra propia vida. Seamos bohemios por una sola noche pues hoy por hoy el amo y señor eres tú, soy yo. Disfrutemos de nuestro propio musical llamado 'vida', démonos el espectáculo que merezcamos y aplaudamos con fervor.
Esta es nuestra realidad, una realidad que hace que finjamos todos los días frente a un espejo que realmente no es tan mierda como lo aparenta. Callamos aquello que a gritos nos desgarra el alma. Hablamos cosas que nos dan arcadas y expresamos cuanto detestamos de nosotros mismos.
Porque la vida es un espectáculo y tu propia mente es el espectador. ¿Tratas de quedar bien con él que en realidad eres tú o solo quieres hacer cosas que detestas para que lo poco de decencia se desperdigue por tus manos como arena en el desierto?
Seamos magos por hoy, tiremos nuestros guiones e impresionemos a montones. Te ofrezco una copa de tu propia vida y espero que brindes conmigo por toda la miseria que nos rodea y corroe. Vomitemos nuestras almas con cada bebida y brindemos una vez mas, porque la vida es una sola y mañana más tarde...ya no lo recordaras.
"Quiero vivir como si hubiera perdido el guión y gritar cada línea como si lo fuera todo...
Y lo triste es que todos estamos en la actuación...
Todos contenemos la respiración esperando una reacción...
Tú interpretas tu papel y yo jugare con los fósforos...
Y si quisieras un espectáculo puedes observar las cenizas..."
Te invitare otra copa entonces, ¿aceptas beber conmigo?
miércoles
❝❞ —: Con la voz de un mudo y mente de delator…
Fueron tantas historias por contar y
tantas preguntas por responder. Fueron tantas decisiones por tomar y tantas
heridas por curar. Fueron tantas canciones para cantar y tantas poesías por
recitar. Fueron tantas letras por escribir y tantos libros por leer. Fueron
tantas cosas que pudieron ser y al final nunca fueron…
La habitación estaba vacía y las miles
de personas allí sonreían con falsedad. La dificultad de unos pensamientos
pesimistas embauco lo que para muchos era importante y cuando los gritos empezaron
a ser emitidos nadie presto atención a quien con el alma hecha pedazos escupía
lo poco que de su corazón quedaba.
Siempre fue difícil sentir como siento
porque lo que sentía nadie lo comprendía o hacía un mínimo intento. Decidido un
día desperté con ánimos de comerme el mundo y este mundo fue tan rencoroso en
su esplendor que dejo ser devorado poniéndose a mis pies, sorpresa gritaron
todos y mande a callarlos de un solo sopetón. Inmundicia y avaricia, predominan
en lo que contamina por dentro y causa placer externo.
Masoquismo y más masoquismo.
¿Por qué seguí sufriendo si un día
decidí sonreír aún con una venda en los ojos y espinas en mi pecho? ¿Por qué la
habitación sigue pareciendo vacía a pesar de la gente que me rodea? ¿Por qué
sigo gritando si mi garganta esta tan seca como un propio desierto?
Deseos le conté a la luna y esta lloro
y replico miles de veces demostrando furor y temor por quien con sangre en las
manos balbuceaba palabras con dolor y dibujaba sombras en su interior.
Lo que a mis pies se encontraba era
más de la realidad que ofrecía el mundo y mostraba un universo tan catastrófico
que verlo me produjo ardor; era mi mente un laberinto que con pincel propio
decidió cincelar desgracias que acataba sin pudor. Ese mundo que se alzo frente
a todos lleno de esplendor y orgullo se mostraba como un vagabundo a lado de
aquel universo que coloreaba tristezas y le quitaba las palabras a aquellos que
deseaban callar y pensar…solo pensar.
“¿Cuántas injurias más podre hacer en tu nombre?”
—Mi
desgracia y tú desgracia — ¿Pero a quien le
hablaba? — ¿Responsable de
penurias quieres? —no me atreví a replicar—. Miraste al espejo si aún así lo
quieres…
❝❞ —: La palabra de un escritor…
Escribamos por placer,
porque amamos el sonido de las letras y cantar de las palabras.
Escribamos por queremos llegar a las personas
pero sobretodo, queramos llegar a nosotros mismos.
Escribamos y regalemos un pedacito de nosotros al mundo.
Escribamos porque amamos,
porque odiamos,
porque simplemente somos humanos.
lunes
❝❞ —: Contradicción…
Había olvidado cuan complicado era
todo esto. Los colores ya no eran vivos pues la monotonía los consumía, los
devoraba, los dejaba sin nada. Las palabras parecían no ser escuchadas solo
porque el movimiento de un par de bocas se veía reducido a lo que parecía ser
una nada queriendo constituir un todo.
Las manos le temblaban, le dolía la garganta. Hacerse notar fue más
complicado de lo que parecía, solo porque aquello que parece suele ser sencillo
en una realidad que se le nombra como ‘nuestro’,
pero es ese nuestro que siempre se ve aprisionado y que aún con llave en mano,
girar una simple perilla se vuelve una proeza sin héroe.
Si las noches transcurrieran como
transcurren los días con sol, el invierno consumiría todo pues son aquellos
amaneceres los que te calan los huesos haciéndote desear que sean esas noches
las que perduren por todo lo que uno necesita o tal vez solo lo que el cuerpo
así desee. Sin embargo son dos cosas distintas, pues nunca llegan a encontrarse
en un mismo punto. Son compañeros de batalla, pero jamás se ven la cara, solo
estrechan sus manos, sonríen a quien no pueden ver y se embarcan en otra misión
con un panorama que parece imposible pero que solo lo es en apariencia.
¿Qué pasaría si pudieran hacer más que
dibujar expresiones vacías? Probablemente serían los labios quienes ya no
encontrarían descanso y la mente se vería como una fabrica en temporada de exposiciones.
¿Y las manos? Las manos son las que no
pararían de elevarse al cielo tan solo diciendo ‘aquí estoy…’
jueves
❝❞ — Lágrimas de Payaso...
En mi mente se repasan los últimos momentos
como cuando conté cada suspiro de tu parte, como cuando repase tus labios con
mis dedos y como cuando ambos lloramos bajo lluvia esperando confundirnos con
las estrellas y volar muy pero muy lejos sin mirar atrás…
En mi mente se repasan esos últimos
momentos y ahora entiendo cuan preciados eran, pues mientras tú me escuchabas
atenta yo hablaba sin parar. Rememoro esos momentos como la vez en la que
calada a calada tú me pedías que te besara y no te dejara de abrazar.
En mi mente se repasan todos esos
momentos pues el maquillaje estaba intacto en mi piel y las sonrisas solían
aflorar con facilidad. ¡Que ingenua eras! ¿Sabes cuantas veces quise llorar?
¿Sabes cuantas veces soñaba dejarme llevar al viento como una hoja seca en
otoño? ¿Sabes cuanto empezaba a amarte y tú sin más…te marchaste? Me
preguntaste porque llorar y yo te respondí que nada en mi rostro podría
corroerse.
Mentí.
Tal vez la relación hubiera sido más
llevadera si nuestras palabras no esconderían verdades como las mascaras
escondes nuestros rostros. Tal vez mi mente no hubiera sido tan autodestructiva
que al más pequeño indicio te provocara pánico para que decidieras dejarme. Tal
vez mis palabras hubieran sido más gentiles para que así tus manos no hubieran
dejado de tocarme. Tal vez mis besos hubieran sabido a verdad que cuando me
preguntaste por el día yo solo pude darte oscuridad. Tal vez hubieran sido
muchas cosas…pero no lo eran.
Suspiro a suspiro y gota a gota.
En mi rostro aun traigo esos colores
intactos y alegres sin que nadie se percate todo lo oscuro que puedo ser por
dentro. El gris me matiza así como un arcoíris se dibujaba alrededor de ti.
No te agradezco por nada pues mi
egoísmo supera mi bondad y es esa bondad que solo tú llegaste a ver…esa aquella
que nunca existió.
Mi mente sigue siendo un caos pero en
lo más recóndito de ella se encuentro algo que subsanar. Como un barco perdido
en altamar, como aquel paraje que siempre se desea encontrar. Le di tu nombre y
el gris de mi interior se empezó a difuminar.
— ¿Porque los payasos lloran? —pregunto ingenuo.
—Lloran porque el maquillaje no es suficiente para cubrir sus verdaderas emociones
cubrió sus muñecas—.
Lloran porque saben que ni las mejores sonrisas fingidas
superaran las más dolorosas lágrimas
—Expreso con una sonrisa, supo que esa expresión era falsa...
pero de todas maneras le correspondió y rieron juntos...
Tal vez queriendo llorar hasta quedar secos.
❝❞ — La Osadía de un Payaso...
Me pregunte miles de veces porque el
tiempo era tan injusto, porque siempre que mis pies querían avanzar mi mente
decidía detenerse. El porque de mis manos inquietas y de mi mente cansada. Cuantas
promesas dichas y cuantas faltas por remediar.
Estaba bien callar, pero mi boca era
lo demasiado traviesa que soltaba todo lo que mi mente descarada soltaba sin
más. De acuerdo, esta bien, mis manos siempre están de aquí para allá queriendo
hacer todo sin importar cuantas veces más termine lastimándolas. Mis cicatrices
más que trofeos a la valentía, son ejemplos de una osadía que muchas veces
debería quedarse bajo llave y candado. Porque, ¿de que otra manera podre
sentirme a gusto sin tener que vislumbrar la sangre y figuras inconexas? Deseaba
dormir pero mis recuerdos me llevan a parajes que no deseo visitar, donde solo
hay sufrimiento quisiera reír pero mis ojos contradicen mi deseo.
Bien, una vez más, todo estaba bien. Mi
garganta arde y mis piernas no dejan de temblar. Hago puño con fuerza y tomo
aliento una vez más. Nuevamente quisiera descansar ¿quisiera descansar? Contradecirme es tan propio de mí como la
lluvia es a las nubes y las nubes a un nuevo cielo. Me levanto, sacudo y sonrió
porque no se nada más mejor que mentir sobre las mentiras profesadas por mi
boca y replicadas por mis acciones.
Lo diré una vez más, estaba todo bien.
Pues no se vio tremenda osadía de mentirle a los mentirosos a través de un
cristal, porque los cuentos de hadas siempre fueron mis favoritos y buscando un
más allá tal vez se encuentre solo un poco más acá.
Finalmente, terminara todo bien. Pues
aquel que le miente a los embusteros puede enfrentarse a verdaderos dragones.
“De cuerpo alado y grandeza por montón, se le conoce de maldades
y de falacias por vivir. Sin embargo a media noche, es bueno escuchar sus
canciones…”
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)










